martes, 21 de noviembre de 2017

El banquete celestial

El banquete celestial
Donald Ray Pollock

Tercer libro de Pollock, que no abandona sus rasgos habituales: la bajeza humana, la sordidez de la vida, el salvajismo que habita en todos nosotros y la inutilidad de la bondad; sin embargo, en esta ocasión se le ha escapado un pequeño rayo de luz, justo al final, que consuela como un sol tropical después del invierno que supone la novela.

Como en “El diablo a todas horas”, Pollock arranca con historias sencillas y aisladas: por un lado tres hermanos y un padre que trabajan para un latifundista sin escrúpulos y por otro un matrimonio de campesinos con un hijo disipado que son víctimas de una estafa. A partir de ahí las historias crecen de modo independiente y empiezan a conectarse tangencialmente mediante personajes y hebras fugaces de forma que al final tenemos un tapiz que forma un todo.

Tensión creciente, gran factura y estilo implacable. Cuesta decir que algo con este sabor se disfruta pero, en cierto modo, es así. Al final la buena literatura siempre sabe bien.

No hay comentarios:

Publicar un comentario