Ella es la oscuridad
Glen Cook
El octavo de la serie. La Compañía puede con el
maestro de las sombras, toma la Atalaya, atrapa a Aullador y a Atrapa Almas y cruza
la Puerta de las Sombras. Y entonces, presa de un ardid de Atrapa Almas, se
encuentra en el altar de Kina y solo el portaestandarte queda libre aunque su
cuerpo yace atrapado con el resto de la Compañía.
Y con esto me doy un respiro porque estoy un poco empachado. Estos últimos
libros son bastante más largos que los anteriores y se hacen un poco
repetitivos; sobre todo el séptimo y octavo, en los que Cook usa una y otra vez
los viajes en sueños (de Humo y de Murgen). Al principio era un añadido exótico
pero ha terminado siendo un Deux ex
machina que cansa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario